En Guatemala, las niñas también corren el mismo peligro que las mujeres. Debemos luchar y trabajar porque ninguna niña más pierda el derecho a vivir dignamente, jugar, soñar y reír.
Este inicio de año está siendo terrible en cuando a desapariciones, asesinatos y feminicidios en el país. Como deja bien claro con sus palabras Carlos Menocal, ministro de gobernación durante el gobierno de Álvaro Colom, “El asesinato de mujeres ocurre por razón de género. No ocurre porque las mujeres salgan a la calle o porque tengan una relación con estructuras del crimen organizado. Hay todo un sistema en contra de las mujeres, que empieza con los agresores que están en sus casas”.
Después de analizar los datos por necrosis que el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) publica en su web, debemos destacar que después de un 2020 en el que hubo un ligero descenso en cuanto a los datos de feminicidios en Guatemala, este inicio del 2021 las cifras volvieron a aumentar. El pasado mes de enero, se registraron 66 muertes violentas de mujeres, 13 más que las que se contaron en todo el mes de enero de 2020.
Pero algo que debemos tener en cuenta, como nos aclara Carmen Rosa de León, directora del Instituto de Enseñanza para el Desarrollo Sostenible (Iepades) es que esos datos, en lo que se ven ligeras mejorías, no deben confundirse ya que “El peso de las mujeres asesinadas es más alto”.
¿Y porqué dice esto de León?
Los datos que el Gobierno de Giammattei vende es que, las cifras de muertes violentas en el país están descendiendo año tras año, pero, según los mismos datos del Inacif, en 2016, del total de muertes violentas, el 13.5% correspondía a mujeres. El año siguiente fue el 14.3%. Después, el 14.7% y en 2019 era del 14.9%. En 2020 se redujo a 14.4%.
Lo que remarca el exministro Francisco Jiménez es que es necesario ir más allá. Hacerse la pregunta clave, ¿por qué?: “Si uno analiza las noticias de medios y las condiciones en las que fueron asesinadas las mujeres, son diferentes de las de los hombres. Las mujeres son asesinadas por su condición de mujer. Es una realidad criminológica”.
Verdades a medias del Gobierno, que siguen invisibilizando a las mujeres y los feminicidios con datos confusos para la población. Un gobierno con una clara falta de políticas de prevención y que hacen que la eliminación de la violencia contra las mujeres parezca lejana.
¿Qué hace el Gobierno de Guatemala?
Entre poco y nada podríamos decir que hace le Gobierno de Guatemala por mejorar la seguridad en el país y acabar con las muertes violentas hacia las mujeres.
Partimos de los siguientes datos para refrendar esta reflexión. Si nos retrotraemos en el tiempo, y recuperamos las palabras que el presidente pronuncio como promesas en su toma de posesión hacia las mujeres es que “todas serán atendidas, escuchadas y protegidas. Si alguien les pone una mano encima, se verá con toda la fuerza del Estado”.
Y nos preguntamos, ¿Qué estado? El mismo que ordena el cierre de la Secretaría Presidencial de la Mujer (Seprem) o el que deja desprotegidos los Centros de Atención Integral para Mujeres Sobrevivientes de Violencia (Caimu) que no recibieron los fondos del Ministerio de Gobernación y que necesitan para pagar salarios y apoyar a mujeres que necesitan ayuda. Este es el Gobierno, que según Giammattei trabaja por la protección a las mujeres.
Lo peor y más preocupantes datos de las últimas semanas son las desapariciones de menores y el estado en que están apareciendo los cuerpos de las niñas. Todas esas desapariciones y muertes violentas están causando gran preocupación en el país y el número de alertas activas no para de crecer día tras días. Hasta el 9 de febrero, han sido cerca de 600 las alertas Alba Keneth* que se han activado en el país, con el departamento de Guatemala encabezando la lista.
En estos momentos, 354 ya fueron desactivadas, porque los menores fueron localizados, pero seguían activas 236. Según Suilma Cano, jefa de la Unidad Operativa del Sistema de Alertas Alba Keneth, es un “asunto preocupante”, porque desde el momento en que se coloca la denuncia se sabe que los menores o adolescentes desaparecidos corren el riesgo de que sus derechos sean vulnerados.
Y así lo hemos podido comprobar justo la semana en la que conocemos la última desaparición y asesinato de una menor de 8 años, que desapareció mientras jugaba con su bicicleta en las inmediaciones de su casa y que fue encontrada al día siguiente muerta con signos de estrangulamiento y golpes en cara y cuerpo.
A este último caso debemos sumar muchos más nombres, hasta completar una lista de más de 66 mujeres y niñas. Según el Observatorio de las mujeres de Ministerio Público, en 2021 el 26% de las denuncias afectan a delitos que se comenten contra la niñez y las mujeres.
Desde Entreamigos-Lagun Artean estamos trabajando con diferentes organizaciones aliadas en el país para que, trabajando junto con grupos de mujeres, luchemos por que cada vez más mujeres tengan acceso a formarse y empoderarse para el reclamo de sus derechos.
Otra importante labor que realizamos en la organización, desde hace ya 25 años, es la de ofrecer herramientas a niñas y mujeres, en forma de becas de estudio, para facilitarles así el acceso a espacios en los que puedan exigir el cumplimiento de sus derechos.
Seguiremos alzando la voz y denunciando todos estos casos de feminicidios y desapariciones forzadas de mujeres y niñas. Porque todas las niñas y mujeres tienen derecho a crecer en PAZ y LIBERTAD. ¡Juntamos podemos compañeras!
* Por lo que se creó el Sistema de Alerta Alba-Keneth con el fin de dar respuesta de forma inmediata y adecuada a las sustracciones y desapariciones de niños, niñas y adolescentes, esto para garantizar la realización de acciones inmediatas que aseguren su localización y resguardo. https://www.albakeneth.gob.gt/index.php/nuestra-historia
FUENTES: Prensa Libre, Ruda, Agencia Ocote, Ministerio Público y Inacif.
FOTOS: Cristina Chiquín Rodríguez y Oxlajuj E.